#Atletismo:Recordando el Atletismo Nacional:Jacinta Sandiford Amador ,la primera medalla panamericana de la Historia del Ecuador:El 6 de marzo de 1951 la ecuatoriana Jacinta Sandiford Amador sorprendió al mundo al adueñarse del oro en la prueba de salto largo de los Juegos Panamericanos.
Con un registro de 1,45 metros la atleta nacida en el cantón Durán obtuvo la primera de Ecuador en la historia de la justa continental.Por esa victoria recibió un diploma firmado por Juan Domingo y Evita Perón, presidente y primera dama de Argentina en esa época.Ricardo Vasconcellos R., en su libro Memorias del Guayaquil Deportivo cuenta que con escasas aspiraciones Ecuador concurrió a los Juegos con una delegación de basquetbolistas varones, luchadores, tiradores y atletas.
El 25 de febrero de 1951 fue la inauguración y nuestra delegación desfiló con uniformes deportivos comprados a última hora. Con el transcurrir de las competencias, el rendimiento de nuestros deportistas era discreto.
El 6 de marzo, último día de los Juegos, reinaba el pesimismo. Ese día competía Jacinta en salto alto y era poco lo que se esperaba de la atleta negra de Durán. Para todos, otras eran las favoritas.
Jacinta apenas terminaba de correr la posta de 4 x 100 planos cuando fue convocada a la prueba de salto alto.
De entrada pidió que la vara sea colocada a 1,35 metros y la superó con facilidad y gran técnica. Fue cuando las favoritas se dieron cuenta de que estaban frente a una gran rival. Más aún cuando la vara fue puesta a 1,40 metros y la Sandiford volvió a pasar la vara fácilmente.
Luego, aconsejada por su entrenador, Rómulo Viteri, solicita la vara a 1,45 metros. “Jacinta se colocó frente al foso de saltos, alzó sus brazos para respirar profundamente. Se agachó ligeramente y emprendió la carrera. Su primer intento fue exitoso, pues logró pasar encima de la vara. Sus rivales debieron emplear dos y hasta tres intentos para superar el listón”, narra Vasconcellos.
Después Viteri pidió la vara de 1,50 metros que Jacinta había sobrepasado en nuestro país, pero ese día en ninguno de los tres intentos. Tampoco sus rivales. Entonces, el resultado se resolvió por el paso de 1,45 metros. La mesa de control decidió que el primer lugar era para Jacinta Sandiford.
El 14 de abril retornó la delegación nacional. La Sandiford fue la primera en descender del avión siendo ovacionada por el pueblo.
Era su época de gloria. Fotos, entrevistas y un sinnúmero de promesas. como siempre, muchas de ellas que nunca se cumplieron.
Su carrera deportiva fue fugaz. Mientras se preparaba para su siguiente participación como seleccionada ecuatoriana, durante los entrenamientos comenzó a sentir una molestia en la pierna izquierda, malestar que se agudizó derivando en una apendicitis, que fue operada a la brevedad posible.
La pierna con la que tomaba impulso para sus saltos aparentemente no volvió a ser la misma y se retiró muy joven.
Jacinta Sandiford, la negra del Ecuador profundo, había realizado una hazaña que solo veinte años después sería repetida por otro deportista ecuatoriano.revisión bibliográfica/mebc
frase celebre de Jacinta:“Hubo muchos pretendientes en el Viejo Continente, pero yo no tomé nada en serio. Estaba enamorada del atletismo, que me abría tantas puertas”.
Jacinta Sandiford